Es muy importante acompañar y aportar a tus hijas en su desarrollo físico, intelectual y social desde temprana edad, para que sus capacidades y habilidades le permitan ser mejor y pueda desarrollar sin ninguna dificultad sus estímulos intelectuales y físicos, a esto se le conoce específicamente como estimulación temprana.
Tus hijas desde que nacen reciben estímulos externos al interactuar con otras personas y con su entorno. Cuando decides estimular su ingenio, les estás presentando diferentes oportunidades, las cuales, les ayudarán a explorar, adquirir destrezas y habilidades de una manera natural y entender lo que sucede a su alrededor.
Por consiguiente, es recomendable que des el paso para inscribir a tu hija en alguna actividad extracurricular, es decir, que esté fuera del currículo académico.
Tu compromiso como mamá es guiar a tu hija en este proceso, te aconsejamos que el primer paso y más importante que debes dar, es observar y hablar con tu hija para saber qué le gusta, ya que, es muy importante respetar su desarrollo individual, evitando que ella se sienta forzada a hacer algo que no es de su agrado o caer en realizar comparaciones o en su defecto cometer el error (sin querer) de presionarla.
El objetivo de que tu hija realice una actividad diferente a lo académico no quiere decir que se le esté forzando a lograr metas que no está preparada a cumplir, por el contrario, lo que debes hacer es reconocer y motivar el potencial que le caracteriza y presentarle retos y actividades adecuadas que fortalezcan el amor propio, determinación y aprendizaje.
Por otro lado, si identificaste al momento de haber hablado con tu hija, que no tiene claridad de la actividad que quiere hacer o está un poco confundida, te sugerimos que realices una pequeña investigación de las actividades extracurriculares que hay disponibles, que se adecuan a los dones o talentos que tu hija posee y transmítele con paciencia las diversas posibilidades que existen y que tiene a su disposición, esto con el fin, de guiarla y proporcionarle confianza en sí misma para que tome la mejor decisión al momento de elegir la actividad que quiere practicar.
Para concluir, no dejes pasar el tiempo y permite que tu hija libere su estrés y sobrecarga que conlleva la realización de trabajos rutinarios y de la larga duración de la jornada escolar, regalándole la oportunidad de practicar una actividad extraescolar, a fin de que ella mantenga un equilibrio físico y mental, también adquiera disciplina en su rutina diaria, facilidad para socializar con otras personas y así, evitar algunos efectos negativos que pueden aparecer como el insomnio, el aprendizaje lento, la falta de atención en clase, entre otros.
Esperamos que este artículo haya sido de gran ayuda. Inscríbete en nuestro boletín para más tips y recomendaciones.